Buenos días.
Estoy segura de que si tenéis niños pequeños a vuestro alrededor: hij@s, niet@s, sobrin@s, estas navidades pasadas no os habéis librado de ir al cine a ver la película "Canta".
Que bueno, digo habéis librado pero las cosas como son, a mí me encantó.
Sí, a mis 41 me siguen gustando muchísimo las pelis de dibujos, así que cada vez que hay alguna en cartelera, allá que me voy con mis chicos a verla. En verdad, creo que en los últimos 10 años las películas de dibujos o para niños supera pero de largo, las que he ido a ver "de mayores" con mi marido o las amigas. Es lo que tiene ser mami. Y me encanta, que conste.
La cuestión es que como os decía en plenas Navidades 3 osadas madres decidimos ir al cine con 6 niños, todos chicos, de entre 4 y 12 años a ver la susodicha película. A los peques les gustó. Nosotras salimos cantando y con unas ganas de irnos de marcha que no veais. Y eso que era uno de esos días en los que la temperatura no superó los 0 grados y había una niebla impresionante. Pero estoy segura de que en ese momento alguien se encarga de nuestros "herederos" y allá que nos vamos a tomar unas cervezas y echarnos unos bailes.
Que me desvío del tema....
La tarta de hoy es como os podéis imaginar, relacionada con la película. La mama de Piero me comentó que su hijo estaba como loco con ella pero que quería una tarta muy sencilla porque era para poquitas personas y el nene aún tiene 5 años.
En estos casos yo siempre recomiendo tartas decoradas con papel fondant comestible, porque quedan ideales sobre todo en los casos en los que los modelados son complicados de hacer y los niños aun no los van a apreciar.
Por dentro, el infalible bizcocho de chocolate negro relleno de swiss merengue de nutella.
Gracias por estar al otro lado.
Un besote y hasta el próximo lunes.
Helena