Hola buenos días.
Esta semana el tema va de bodas ya que estamos inmersos en plena época de ellas. Y yo tengo una pena enorme en mi cuerpo porque este año no tengo ninguna. Ninguna como invitada (afortunadamente sí de trabajo).
Y lo que me gustan a mí las bodas. Disfruté la mía hace ya 9 años como una enana (creo que no ha habido novia más bailonga que yo) y a todas las que he acudido. Me encanta ponerme el tacón, el vestido y el tocado; me encanta la magia que desprenden; esos momentos únicos que se viven... Vamos, que yo me volvía a casar ahora mismo (con el mismo, eh¡¡).
Hace años, sin ir más lejos, cuando yo me casé, las tartas de los novios eran las clásicas. De hecho yo ni corté porque no me gustaban. Afortunadamente ahora esto ha cambiado y gracias a la repostería creativa, las tartas nupciales se pueden personalizar a gusto de los novios, imprimiendo en ellas parte de su personalidad.
Y para muestra, un botón: una clásica en tonos rosas y plateados, con decoraciones en encajes de azúcar y otra mucho más moderna en turquesas, cremas y dorados, llamada "Love in Paris".
Y lo que me gustan a mí las bodas. Disfruté la mía hace ya 9 años como una enana (creo que no ha habido novia más bailonga que yo) y a todas las que he acudido. Me encanta ponerme el tacón, el vestido y el tocado; me encanta la magia que desprenden; esos momentos únicos que se viven... Vamos, que yo me volvía a casar ahora mismo (con el mismo, eh¡¡).
Hace años, sin ir más lejos, cuando yo me casé, las tartas de los novios eran las clásicas. De hecho yo ni corté porque no me gustaban. Afortunadamente ahora esto ha cambiado y gracias a la repostería creativa, las tartas nupciales se pueden personalizar a gusto de los novios, imprimiendo en ellas parte de su personalidad.
Y para muestra, un botón: una clásica en tonos rosas y plateados, con decoraciones en encajes de azúcar y otra mucho más moderna en turquesas, cremas y dorados, llamada "Love in Paris".
Así que ya sabéis, si estáis preparando vuestra boda, pensar en cómo os gustaría que fuese vuestra tarta y sea lo que sea, se puede hacer (tengo entre manos una barrica de vino para un novio enólogo.. jeje).
Un besote grande
Helena