lunes, 21 de mayo de 2018

Tarta mando Play

Hola buenos días.

12 años. 12. Esa es la edad que Pablo, mi mayor, cumplió hace unos días. Ese es el tiempo que llevo siendo mama.

Y parece mucho. Y según se mire, lo es. Y ha cundido. Mucho. Pero a la vez, se ha pasado tan rápido.

Ahora que veo a mi hermana con sus bebés pienso: ¿pero si hace nada estaba yo así y ahora tengo un hijo a punto de entrar en el instituto? ¿pero donde se ha quedado ese tiempo?

Cuando tienes hijos pequeños, todo el mundo te dice: aprovecha que crecen muy rápido. Pero una está metida en esa vorágine de pañales, teta, bronquitis y falta de sueño, muuuucha falta de sueño (al menos mi caso), que disfrutar, lo que es disfrutar, no se si es muy posible.

Y luego llega otro bebe. Muy seguido. Y entonces esa vorágine se convierte en algunos casos en "locura temporal transitoria".

Porque amigas (y algún amigo que también nos lee), seamos sinceras: los bebes molan. La maternidad es genial. Pero en ocasiones, en muchas ocasiones, es demoledora. O al menos para mí lo fue.

Y ojo, que lo volvería a repetir mil veces porque sin duda, Pablo y Nicolas son y serán lo mejor que haga en mi vida. Pero la crianza no es tan fácil ni bonita como la ponen en las revistas.

Dicho todo esto, pues eso, que Pablo ha cumplido sus 12 años y ya no tengo un niño: tengo todo un adolescente en casa. Tal cual.

Y ¿que tarta se le hace a un niño/adolescente? pues mira, curiosamente por esto no discutimos (sí, estamos en ese momento que cada cosa que decimos hay que discutir, aunque luego con comamos a besos): una tarta/mando de la Play.







Disculpadme por la calidad de las fotos pero ya se sabe, en casa del herrero cuchara de palo, así que fue literalmente acabar la tarta y llevarla al cumple así que hice las fotos a toda prisa y con el móvil.

Por dentro era un bizcocho de chocolate relleno de merengue suizo de dulce de leche y además sin gluten, para que Nicolas y yo también pudiésemos comer.

Espero que os haya gustado. La verdad es que es una tarta super resultona y nada complicada de hacer.

Un besote y hasta el próximo día.
Helena

lunes, 7 de mayo de 2018

Fiesta "Tipis de Safari"

Hola buenos días.

Hace unos días, Nicolás, mi hijo pequeño cumplió 10 años.

Lo primero que me dijo el día de su cumple cuando se levantó fue: "mamá, ya tengo dos cifras en mis años".

Y a mí, a pesar de verlo tan contento, me dio un pequeño vuelco el corazón. 

Dos cifas. Mi pequeño se ha hecho mayor. Ley de vida y así tiene y debe ser. Pero, se ha pasado tan, tan rápido.

Hace tiempo su padre y yo habíamos decidido celebrar su décimo cumpleaños de una manera especial. Pero no teníamos claro cómo.

Así que cuando conocí a Alejandra, de "Las Historias de Valentina", en colaboración con "Mimos y Monas", se nos despejaron todas las dudas: montaríamos todo un safari en el salón de casa.

Tengo que deciros que el cuidado, detalle y cariño que Alejandra le pone a todo lo que hace es el éxito absoluto de sus eventos. De verdad, desde aquí, mi increíble agradecimiento porque la fiesta superó todas nuestras expectativas.

Y qué deciros de la cara de Nicolas y sus amigos donde vieron donde iban a pasar la noche. Porque ellos pensaban que venían a dormí a casa son más. Que ya de por sí, molaba.

Pero cuando vieron todo lo que tenían montado, Nicolás, Miguel, Diego, Alvaro, Sayari, Sofía y Vera simplemente alucinaron.
Como veis, el detalle es increíble. Todos los tipis tienen su colchón, su almohada y su manta para cada niño/a. Además una mesita donde cenaron. Era el día de la final de la Copa del Rey y como todos y todas son muy futboleros, disfrutaron como locos viéndola y cenando pizzas.

Además tenían sus nombres, un antifaz cada uno, su casco de exploradores y una especie de candiles para la noche.

Y ya cuando apagamos las luces y encendimos las luces que había en las hojas... no sabéis que ambiente más espectacular se hizo.
Protegiendo el anonimato de los amigos/as de Nicolás, aquí los tenéis a altas horas de la noche. Porque la verdad, dormir durmieron más bien poco. Pero... ¿acaso no se trataba de eso?
Ademas yo pues una pequeña mesa dulce decora a modo de safari. Y lo que más les gustó aunque no se ve en la foto fue el puesto de limonada casera que ellos mimos se podían echar y la máquina de palomitas que me dejó Alejandra.

El toper personalizado del brazo de gitano "versión safari" por cierto es de "Knots made with love".

Os aseguro que las fotos no hacen justicia a lo precioso que estaba todo.

Desde aquí una vez más, gracias mi a Alejandra y a Mikel por el cariño y el mimo que pusieron para que el décimo cumpleaños de Nicolás fuese, simplemente, inolvidable.

Un besote y hasta el próximo día.
Helena