Hola buenos días.
La tarta que hoy os voy a enseñar forma parte de las especiales para mí. Y cuando la veáis, diréis: pues bueno, tampoco es para tanto. Helena ha hecho tartas más difíciles y espectaculares que esta. Y cierto es. Pero es que el destinatario de la misma es una de las personitas más importantes de mi vida: mi sobrino Tian, que el pasado 1 de diciembre cumplió su primer año de vida.
Yo sólo tengo una hermana y por circunstancias de la vida, estaba casi convencida de que nunca me haría tía. Pero el pasado año recibí uno de los mejores regalos que me han hecho nunca. No os miento cuando os aseguro que el día que mi hermana me dijo que iba a ser tía al principio no reaccioné.
Estaba decorando unas galletas (me acuerdo perfectamente) y seguí como si nada, pensando que estaba vacilándome. Y cuando tras unos segundos ví que tanto ella como mi madre asentían diciendo que era verdad, verdadera, pegué tal grito que me tuvieron que oír por media ciudad.
Estaba decorando unas galletas (me acuerdo perfectamente) y seguí como si nada, pensando que estaba vacilándome. Y cuando tras unos segundos ví que tanto ella como mi madre asentían diciendo que era verdad, verdadera, pegué tal grito que me tuvieron que oír por media ciudad.
Por circunstancias, el embarazo de mi hermana tiene sus complicaciones así que el pasado 1 de diciembre de 2015 cuando nació Tian, fue de los días mas felices e increíbles de mi vida.
Y claro, tras tantos años sin bebés en la familia, el pequeñajo se ha convertido en el juguete de todos nosotros y especialmente de mis hijos. Rubio, precioso, dormilón y comilón a partes iguales. Y digo yo ¿cómo se hacen niños tan tranquilos y buenotes?, con lo tremendos que fueron mis hijos de bebes para dormir. Ainssss.
La tarta que le hice como veis es muy sencilla, pero eso quiso mi hermana. Verde pastel, con un arco iris grande, pequeñas nubecitas de colores y el nombre (original, lo sé) de mi sobrino.
Por dentro era de vanilla y claras montadas y hecha con azúcar panela (el azúcar moreno más puro que hay porque esta sin refinar). Sencilla para que no hubiese ningún ingrediente que el pequeño Tian no pudiese comer. Rellena de swiss merengue buttercream de caramelo. Y por supuesto toda, todita era sin gluten. Apta para toda la familia.
Tian, eres genial y desde aquí solo decirte que tu tía espera hacerte muchas, muchas tartas a lo largo de tu espero, larga y precisa vida. Gracias por hacerme uno de los mejores regalos de mi vida: ser tía.
Un besote
Helena
Hola! Te quedó preciosa y el corte se ve espectacular! Tenemos muchas ganas de probar el smb d caramelo! Besis
ResponderEliminarUna tarta ideal a la altura de un bebé ideal. Disfrutadlo muuuchooo que crecen rapidísimo!!! Ya lo sabes.... Un besazo guapisima
ResponderEliminarAna
Se nota el cariño conque esta hecha, te quedo preciosa!!
ResponderEliminary el corte genial!! Besos